Pese a la diferencia de jerarquía, el conjunto saudí estuvo muy cerca del empate, especialmente en el segundo tiempo. El único tanto del encuentro lo convirtió Lukaku
El Mundial de Clubes es habitual ámbito de sorpresas. Desafortunadamente, no muchas de ellas son de equipos sudamericanos, pero sí de africanos y asiáticos. Y, en este caso, lo asombroso fue el desarrollo del juego, más allá de que el resultado finalmente fue el lógico. Chelsea sufrió pero consiguió ganarle 1 a 0 a Al-Hilal de Arabia Saudita con gol de Romelu Lukaku y jugará la final del torneo ante el Chelsea.
La primera parte tuvo bastante relación con la jerarquía de ambos equipos. Aunque, ya de arranque la postura del campeón asiático sorprendió: no se metió atrás tan sólo para aguantar el empate, sino que apostó al golpe por golpe y pudo sostener durante varios pasajes el alto ritmo de juego propuesto por el equipo inglés.
Los petrodólares con los que cuenta Al-Hilal le permiten tener en el plantel a jugadores con pasado en clubes importantes de Europa, como Moussa Marega, ex Porto, Matheus Pereira, ex Sporting de Lisboa o Odion Ighalo, quien jugó en el Manchester United. En base a eso pudo sostener bastante bien el juego contra uno de los mejores equipos del mundo.
Sin embargo, a los 30 minutos, un error propio le cedió el tanto decisivo al equipo londinense. Kai Havertz tiró un centro que no encontró destinatario y Yasir Al-Shahrani se la bajó sin intención nada menos que a Lukaku, que, por supuesto, no perdonó.
En la segunda mitad, el conjunto saudí mostró una versión absolutamente mejorada. Durante más de media hora se apoderó de la pelota y generó no menos de cuatro situaciones de gol, muchas de las cuales requirieron de intervenciones muy esforzadas del arquero Kepa Arrizabalaga.
Al-Hilal mereció el empate, pero se quedó sin energía para empujar durante los últimos minutos, cuando el Chelsea, mediante los cambios, tuvo más oxígeno, recuperó la pelota y pudo transcurrir el final sin mayores sobresaltos.
El equipo comandado por Thomas Tuchel que no está presente con el equipo por haber contraído COVID-19 está en la final del torneo. El sábado definirá quien es el campeón ante el Palmeiras de Brasil, actual campeón de la Copa Libertadores.
