Hubo que esperar un poco más de cuatro meses para que Los Pumas pudieran volver a encontrarse. La última imagen que se tenía de todos ellos como equipo, era la del partido revancha frente a Inglaterra, del 27 de octubre de 2023, por el tercer puesto de la Copa del Mundo, que fue con derrota y sirvió como despedida del Mundial de Francia en un cuarto y honroso lugar, luego de jugar en siete partidos y despedirse con otra derrota como en el debut ante los de La Rosa, en una performance en donde nunca pudieron encontrar el equilibrio deseado.
De esta forma la Selección Nacional, que en ese momento era dirigida por el australiano Michael Cheika, renovó sus ilusiones ahora a cargo de quien por entonces era su principal ayudante y mano derecha (Felipe Contepomi) y puso en marcha un nuevo período, cuyo destino final será el Mundial de Australia 2027.
En este Camp que se llevó adelante del 11 al 13 de Marzo en la ciudad de Londres, y que duró muy poco, el flamante Head Coach sumó a un nuevo integrante del staff técnico: el neozelandés Brad Mooar.
El plantel nacional vivió entonces tres arduas jornadas de trabajo en equipo en las cuales el foco estuvo puesto en trazar un diagnóstico de manera conjunta, entre el cuerpo técnico y los jugadores, sobre la actualidad y los objetivos a futuro de Los Pumas.
También se realizaron evaluaciones físicas generales de los 30 integrantes del plantel. No hubo entrenamientos, ni tampoco nada de rugby; la única tarea en el campo fue en Hazelwood Centre, el complejo deportivo del London Irish y estuvo relacionado a los testeos por parte del preparador físico Juan Ignacio Covassi.
De los 31 jugadores convocados originalmente, el único que no pudo participar del Camp fue el centro rosarino Jerónimo De la Fuente; quien sufrió una lesión en su club (Perpignan), y por esa causa fue dado de baja para sumarse al plantel al que había sido convocado.
En el cierre de esta experiencia (una modalidad que ya se había llevado a cabo en marzo del 2023 en París, con el anterior entrenador, su staff técnico y los jugadores), el capitán Julián Montoya ofreció un balance de lo ocurrido: “Lo mejor del Camp fue, sin duda, reencontrarnos nuevamente. Con muchos compañeros no nos veíamos desde el último partido del Mundial ante Inglaterra, y volver a vernos después de tanto tiempo es una energía y un ambiente espectacular que, la verdad, se extrañaba mucho”.
Los Pumas durante su estadía en Londres. Imagen: Prensa UAR
Y añadió: “Estoy muy feliz desde ese lado; después, fueron unos días en los que se trabajó en la parte física, haciendo distintos testeos para ver dónde estamos parados, y planteándonos hacia dónde queremos ir”. “Hicimos un análisis de los últimos dos años, y hablamos mucho de continuar con este proceso que estamos haciendo y el comienzo del nuevo ciclo mundialista, en el cual se plantean objetivos a corto, mediano y largo plazo”, señalo el ex hooker de Cardenal Newman.
Luego Montoya expresó: “Fue un Camp espectacular, muy positivo, porque vimos dónde estamos, cómo podemos ser mejores, qué queremos mejorar y, la verdad, estoy muy entusiasmado con todo lo que viene”.
El calendario 2024 del seleccionado nacional también fue un tema al que se refirió el capitán argentino, y dijo: “Sin duda volver a la Argentina siempre es lo mejor del año de Los Pumas; poder jugar con tu gente, en tu país, es algo espectacular. Jugar dos partidos en casa con Francia es un desafío enorme; estamos todos muy contentos y entusiasmados con esa posibilidad”. Y continuó: “Además, se suma el Rugby Championship y otra ventana en noviembre, con lo cual es un año muy cargado y muy desafiante, pero es lo que más nos gusta y lo que más buscamos”.
El recuerdo de lo que fue la actuación en la Copa del Mundo de Francia 2023 quedó ya como referencia, pero Julián Montoya también mira hacia el futuro: “Jugar una Copa del Mundo es lo máximo a lo que uno aspira como jugador, y hacerlo con la camiseta de Los Pumas lo convierte en algo más especial aún. Creo que haber llegado al cuarto puesto es algo bueno, aunque nos queda la espina porque queríamos una medalla y no lo conseguimos; pero haciendo una evaluación desde ese partido con Inglaterra por el tercer puesto hacia atrás, sin duda fuimos de menor a mayor”.
“Se nota que tenemos mucho por mejorar, y eso es lo que vimos en este Camp en Londres. Un montón de esas cosas que vimos, sí las estamos intentando corregir; pero bueno, el desafío ahora es mejorar lo que estamos haciendo bien y ver cómo podemos ser un mejor equipo para superar las cosas que hicimos mal o no tan bien. Ese es el desafío que tenemos por delante. Por eso hablamos de continuar con el proceso que estamos haciendo, en el cual fuimos mejorando mucho en los últimos años, y conseguimos las primeras victorias muy importantes para el equipo, como lo fue ante Nueva Zelanda, o vencer a Inglaterra en noviembre, y también ganar la serie con Escocia y los partidos con Australia”, reflexionó Montoya.
Para finalizar señaló: “Creo que fueron cosas muy positivas, y ahora es seguir con ese proceso, buscar una consistencia mayor, buscar esos resultados que queremos alcanzar, sabiendo que es un ciclo mundialista nuevo”.
